En el viaje del pez de Carol, se recogen una declaraciones de un señor homosexual que aboga simplemente porque quien no defienda tales comportamientos o ponga alguna pega o se manifieste contrario, que sea delito y que vaya a la cárcel. Yo suelo explicar derecho de familia, entre otras cosas, y hablo del matrimonio, no tengo que decir heterosexual no hay otro, y me dispongo a ser denunciado y quizás ir a la cárcel. Carol me decía que en un país de leyes injustas es un honor acabar en la cárcel, tiene razón. Un profesor mío contaba lo siguiente: se trata de un alemán que quiere ir a otro país pero debe decir sus motivos, a lo que se niega. Al fin. viendo que su propósito no es factible se decidió a hablar." En la época de mi juventud la homosexualidad estaba penada y era un delito lo que me parece mal, hoy está bien vista y admitida socialmente, quiero irme antes de que sea obligatoria".
Bravo: estoy contigo. Es un honor que nos enchironen, si es por eso. Por cierto no te pierdas la campañita gay que hoy se publica en el mundo: a estos chicos se les ve el plumero (con perdón).
ResponderEliminarVaya, Sinretorno, gracias por nombrarme. Es un auténtico honor :)
ResponderEliminarInteresante lo del señor alemán...
Gracias, un dia más por tus letras.
QDtb! [y nos acompañe a la cárcel :P]