Estás en un blog espumoso, intimista, paradójico; de lo humano y de lo divino. No soy mejor que tú... Me propongo hablar a la cara y que me hables a la cara, sin caretas, sin retorno, a quemarropa... blog del Profesor Tirapu
domingo, diciembre 03, 2006
San Francisco Javier.
Es el gran santo de las misiones. Su brazo de tanto bautizar tenía que ser asistido por niños. Navarro, no se las llevó muy bien con el vasco castellano de Ignacio. Universitario, las enamoraba fácilmente, galante, pendenciero, noble, muy noble. De que te sirve ganar el mundo si pierdes tu alma, tu vida?. Quiero tener una vida, no historias. Javier fue por el mundo llevando a Cristo y gritaría a los estudiantes de las Universidades, entonces eran élite, que fuesen por el mundo dándose cuenta de lo que de verdad vale la pena. Pido por las misiones y por China.
Perdona que venga aqui con la prueba del algodón pero es que hay una cosa en tu comentario que me parece un poco aventurada, y además este es un santo que me toca muy de cerca por eso hago el comentario. Me refiero a eso de: "las enamoraba fácilmente". Supongo que te refieres a las mujeres. De hecho San Francisco Javier, antes de conocer a San Ignacio y mucho antes de plantearse una vida a Su servicio, ya pedía a Dios con especial intensidad que le preservara casto. Y sus biógrafos coinciden en que así ocurrió y que lo fue de un modo extraordinario. Y de hecho lo que sacaba de quicio a San Francisco Javier de la cultura hindú eran las representaciones de mujeres extraordinariamente voluptuosas en pinturas y esculturas. Como lo que más destaca de San Francisco Javier es su carisma misionero, como muy bien señalas, otras cuestiones a las que el santo atribuía importancia verdaderamente notable no suelen destacarse tanto. La castidad es sin duda una de ellas, pero también lo fue la obediencia (es conocida la historia de Hermosilla- creo recordar que este era su nombre- el hermano al que expulsó de la Compañía por desobediencia a una orden suya)o la excelencia en el estudio.
ResponderEliminarMuchas gracias. Me refería a que San Francisco levantaba pasión, en Roma tuvo que dejar de predicar...
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