Slumdog millionaire.

Ha sido la gran película del año. Yo llego tarde, pero me ha encantado. Un niño de la calle de la India, su hermano mafioso y una chica, también perros de basurero y de la calle. El protagonista se presenta al concurso de ser millonario para contactar con su amor de niñez, Latika. El chico contesta porque ha aprendido de la vida cruel y azarosa. Es una especie de Rinconete, romántico y noble, acostumbrado a los golpes en sentido físico. Hay un mensaje trascendente, Dios es grande, está escrito el destino. Pero al tiempo hay que buscar, poner los medios con picardía para recuperar lo que más queremos. No cuento más. Al tiempo, una reflexión, esa India emergente, que tiene la bomba atómica, haría bien en organizar mejor a su población y su miseria.