Gentileza de Joaquín Serrano. La primera es el Tribunal, no de la Rota, pero casi, Sinretorno es el fuerte, guapo y con antifaz. Observen la sonrisa de la profesora Garcimartín, la paz del Profesor Mantecón, el escepticismo del Profesor Navarro Valls, el flequillo del profesor Martínez Torrón.
Me voy a hacer hasta el domingo de Pascua unos días de retiro. Procuraré convertirme una vez más, seguir a Jesús y su Madre en su Pasión, muerte y Resurrección, y rezar con calma por familia, amigos, colegas, alumnos y por supuesto de todas las blogueras y blogueros de la red. Que sea una Semana Santa, en el camino de la cruz y de la resurreción. Abrazos.
Está pero que muy bien, cambio de tres farolas en tres meses. ¡Esto es productividad! Un abrazo.
ResponderEliminarLo que observo es que el único que trabaja es Sinretorno. Aunque sólo sea por eso, debería estar en el centro (el centro para quien lo trabaje).
ResponderEliminarBuena semana santa y feliz Pascua.
Igualmente. Feliz Semana Santa y que Cristo Resucitado pase fuertemente por tu vida.
ResponderEliminarEl Plan E de Zp es una broma.
ResponderEliminarYa tiene usted la crítica de Encontrarás dragones en el blog.
Que la disfrute!
Saludos,
A.
Eso es ahorro.
ResponderEliminarFeliz Semana Santa a todos.
Excelente tribunal, y perfectamente descrito.
ResponderEliminaramen hermano
ResponderEliminarBuen retiro y Santa Semana Santa
ResponderEliminarFeliz Semana. Acuérdate de tus seguidores de facebook, los Gracia.
ResponderEliminarUn saludo
Pues has salido mu bien, Sinre. Feliz semana. ¿Eres del Real? Es que puse hoy poesía para Iker.
ResponderEliminarSaludos blogueros
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMe siento presentada y representada ante el Señor en el retiro de don Sinre.Muchas gracias y santa y feliz Pascua para él y para todos los globeros que por aqui se asoman.Un abrazo de Janusa
ResponderEliminarHermano Sinretorno, bendiciones para este blog. Que estos días de ejercicios le sirvan para llenar de luz su camino. Estaremos en perfecta comunión con todos sus buenos deseos para que nuevas epifanías espirituales puedan compartirse, si Dios lo quiere, en este espacio rebosante de vigorosa espiritualidad.
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