Un sacerdote católico recorre en su jeep zonas de la américa profunda en su labor pastoral. Una indita mayor va por el camino hacia el cementerio. El sacerdote la recoge y le pregunta a dónde va: " al cementerio, a ver a mi hijo que murió durante la segunda guerra mundial; cada vez que le visito, pongo un canto rodado en su tumba". El sacerdote le acompaña y comprueba que la tumba está cubierta de cantos. La madre india le dice: " el mundo sin memoria, sin recuerdos es como viento sobre la hierba".
Días después el sacerdote recibe la visita de un agresivo comercial que le intenta vender un computador u ordenador. No está muy convencido el cura. El comercial echa mano de su último argumento: " este ordenador tiene más memoria que la de una madre". El sacerdote definitivamente rechaza la compra...
Desde hace poco hablo yo con una madre.Ninguna dominamos el idioma de la otra pero nos entendemos a la perfección.decimos que no hablamos el mismo idioma pero sí el mismo lenguaje.
ResponderEliminarLo hemos acabado llamando el "idioma de las madres".
Y una cosa es cierta,muchas comentamos que hasta que no se es madre una no entiende bien a la suya en toda su profundidad.
Escribo ésto desde el nuevo ordenador que he tenido que comprar porque el anterior tenía poca capacidad de memoria.
¿De donde esta entrada Sinret? Me deja sin palabras. solo silencio y meditación.
ResponderEliminarBenditas vosotras que sois madres!!!. Es muy bueno que el ordenador tenga más memoria..
ResponderEliminarY luego nos dicen que no hay que fiarse de la tecnología... Sin embargo con los móviles pasa de todo, hay muchos africanos que compran móviles todos ilusionados, pero luego se encuentran con la cruda realidad: ¿Dónde recargar la batería? Y así todo.
ResponderEliminarLas nuevas tecnologías, "es lo que tiene.!", pero qué haríamos sin ellas.!!! Podría Usted Don Sin retorno, estar, dos, tres años sin comunicarse por internet, teléfono,... Sólo por carta y ya es decir? Cuando se pone en tela de juicio la utilidad de la tecnología, creo que lo que se hace es más daño a la humanidad. Comparar la utilidad de una máquina, con la utilidad de un ser humano, es un negocio que no tiene sentido. Es como decir "yo soy mejor, pues yo más, etc.".
No es necesario ser madre, para darse cuenta de lo interesante que es la utilidad de las nuevas tecnologías y de las no tan nuevas.
Yo les cuento una historia...ustedes sacan sus conclusiones.. Gracias al ordenador, podemos compartir esta historia. Maravilloso.
ResponderEliminarGracias al ordenador !compartimos tantas cosas!Por ejemplo,esta preciosa historia...Estos dias he estado viendo un serie televisiva de Spilberg (?),Hermanos de sangre.Es la historia de una compañia paracaidista,de EE.UU,desde el desembarco en Normandia.Me ha gustado mucho,de vez en cuando veo cosas de estas,no quiero olvidarlas.Y siempre,siempre,al ver morir a chicos de unos 20 años,pienso en sus madres.Ahora pensaré también en las piedras depositadas sobre una tumba.Eran muchas,nos dices.Serían muchsa visitas,muchos dias.Un abrazo de Janusa
ResponderEliminarLa madre es el no va mas,no hay nada que se le iguale.Cuando la tenemos cerca no nos damos cuenta cuando se nos va es demasiado tarde
ResponderEliminarAhora saldré por peteneras como de constumbre. Yo pienso en mis hijos y mi capacidad de amor hacia ellos no no podria competirmela ni toda la tegnologia junta de internet. Pero pienso en los fetos arrancados de los uteros y en esas madres y en que memoria, si la hay?
ResponderEliminarDios dice, aunque tu madre se olvidara de ti, yo no me olvido.
ResponderEliminarEnternecedor todo, pero sólo quiero hacer una pregunta ingenua (en realidad, varias preguntas concatenadas): ¿cuántos indígenas americanos murieron en la Segunda Guerra Mundial? ¿Fueron trasladados sus restos mortales desde Europa (o Asia, o África) hasta el continente americano para que descansaran la tierra patria? ¿quién se hizo cargo de tal repatriación? ¿Con fondos públicos o privados?...
ResponderEliminarSu madre de Vd. está en Casa y no deja de cuidarle...quiere todo eso para Vd.
ResponderEliminarRelájese, disfrute con santa medida (única forma de disfrutar aquí) y téngalo por seguro.
Un abrazo.
Seguro que hubo alguno. Hay una película de N. Cage, donde aparecen como traductores de claves secretas en algún idioma indio. USA es muy atenta con quienes mueren en combate, seguro que los repatriaron y con fondos públicos.
ResponderEliminarEstoy casi segura de que en Arlington hay tumbas de indígenas.En efecto,entre los tan cacareados defectos de Usa no figura el ser desagradecida con sus heroes.El tema de las repatriaciónes se trata con mucho cuidado,está bastante estudiado en la segunda gran guerra,creo.Puede suceder también que las familias deseen una tumba en su ciudad y según sus constumbres,parece que este es el caso de este indio.
ResponderEliminarSe me olvidó firmar,la de Arlington soy Janusa.No omporta gran cosa pero no me gusta el anonimato,para mi digo.Un abrazo
ResponderEliminarNo, el anonimato no le va! a una hija predilecta de Nuestra Señora.
ResponderEliminarLas cosas como son!