Un ejecutivo de una empresa importante vio cómo todos sus compañeros ejecutivos, cambiaban de ciudad o de destino , excepto él. Estaba muy preocupado y pidió hablar con el jefe de su empresa. Le manifestó su asombro y su sospecha de que algo no iba bien. La respuesta fue: "ni se van los mejores, ni se quedan los peores". Qué alivio.
El equilibrio al que se tiende,la paz interior etc es un lujo de unos pocos.Todo el mundo tenemos historias que nos llevan de cabeza.La vida consiste en eso, en saber convivir con todas esas historias ,con buena cara.
ResponderEliminarYo le visito todos los días, nunca dejo de entrar y leerle, pero a veces no quiero opinar porque el tema lo desconozco, y otras, porque ando de carreras en inet.
ResponderEliminarUd. sabe que es mi regalón, no sea tontito :d
Esa historia me recuerda una de las características más despiadas del capitalismo: la competencia que desata envidias, aserruchadas de piso, puñaladas por la espalda, etc.
Un abrazote