Muy interesante.....
El viernes 26 en el diario El Mundo hubo un reportaje sensacional de Pedro Simón. Seguramente, como algún tuitero dijo, es el reportaje del año. Para mí, al menos, lo fue. Y lo fue por una doble razón: de lo que trataba y de cómo se contaba. La FORMA es también el contenido, un mal enfoque o un modo pésimo de contar machaca la mejor de las realidades, ejemplos hay a cientos hoy.
Trataba de una familia de acogida, una pareja de mediana edad, él, Pablo Bocannera, en paro, ella, Elisabeth Delamer, daba clases de inglés. Con dos hijas criadas, y AHORAambas en la universidad, decidieron en 2008 acoger a niños. Niños, que en este caso, tienen problemas serios de salud, de discapacidad, John y Rosa.
Leí el reportaje a pesar de la mala conexión que tenía viajando y de repente fue mucho más Navidad. Porque la pareja de Alcalá Meco lo contaba todo con mucha sencillez, y el periodista también. Un reportaje, ya digo, fuera de lo común, un cuento de Navidad de lo más real, con el elemento clave para este tipo de CUENTOS, que no es la lágrima fácil o la bobadita sentimental, sino la esperanza en el género humano.
Creo que ésta es la mejor noticia de la semana y del año que acaba y que inaugura bien ese otro que va a empezar. Y creo que es “noticia” tanto el hecho de que una pareja se complique la vida con tantísima naturalidad, como que un medio de comunicación le PRESTE atención y un periodista lo sepa contar tan bien.
Y es que, desafortunadamente, no es que no existan personas que hagan un mundo mejor, de esa manera y de otras muchas, sino que el espacio público y mediático, también las redes sociales, no sé por qué razón, se llenan de mil estupideces, de debates o duelos de floretes verbales a cual más ingenioso o a cual más rompedor, PERO con poco de eso que nos hace más humanos. Y eso que nos hace más humanos, creo, es reconocer lo valioso y no estar prendido de lo que no lo es.
Hay no sólo personas admirables, excepcionales en su bondad, hay también mucha belleza, muchos libros, películas, arte, lugares, temas interesantes e, incluso dentro de la actualidad, creo que puede haber un tono que no es el del debate o la vulgaridad, ese poco peso al que estamos habituados, un espíritu de los TIEMPOS al que parece que hay que rendir pleitesía.
El reportaje de Pablo y Elisabeth tenía, no sólo por ellos –aunque ellos eran lo fundamental-, sino también por quien lo escribió, un toque diferente que se salía de lo habitual, nada lacrimógeno o sentimental. No necesitamos más sentimentalismo, necesitamos que nos cuenten esa otra realidad y que lo hagan así, tan BIEN.
Aurora Piment
1 comentario:
Esto es lo que necesitamos.Saber que podemos confiar en el género humano.Da alegría y ganas de hacer cosas.
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