viernes, abril 29, 2011

Pier Paolo Pasolini y el aborto.




Ensayista,poeta,cineasta, homosexual. En sus artículos publicados en Il Corriere della Sera entre 1973 y 1975 Pasolini se opuso radicalmente a la legalización del aborto: "Estoy traumatizado por la legalización del aborto porque la considero, como muchos, una legalización del homicidio. Que la vida humana sea sagrada es obvio: es un principio más fuerte que cualquier principio de la democracia. Diciendo que está en juego la vida humana hablo de esta vida humana -esta única, concreta, vida humana- que en este momento se encuentra dentro del vientre de la madre".Para él, apoyar el aborto libre, lejos de ser una opción progresista, era la más perversa manifestación de esa "nueva industrialización que ya no se contenta con que el hombre consuma, sino que pretende que no sea concebible otra ideología que la del consumo: un hedonismo neo-laico, ciegamente olvidado de todo valor humano y ciegamente extraño a todo humanismo". Este hedonismo de masas, fomentado por el poder con independencia de su color político (en nuestro caso servido por esa ex-izquierda ferozmente consumista y estúpidamente antihumanista que es el actual PSOE), "esconde una decisión de reordenarlo todo con un carácter despiadado tal, que la historia no ha conocido jamás". "El aborto legalizado -escribe- es una enorme comodidad para la mayoría", a la que se le ofrece la libertad sexual como uno de los sustitutivos consumistas de la verdadera libertad: la que proporciona la racionalidad crítica. Por eso, al igual que Norberto Bobbio, Pasolini desplaza el problema del aborto a su origen: "No se puede hablar políticamente del aborto sin considerar políticamente el coito". Al poder del consumo le viene bien la frase de Sade que Pasolini tantas veces citó: "Las cabezas ocupadas en libertinajes no maquinan revoluciones". Y ya "no le interesa una pareja creadora de prole (proletaria), sino una pareja consumidora".

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Genial.Consumo salvaje y estimulado de sexo,placer por el placer mismo.Es la evolución hacia atrás,es embotar al ser humano para manipular alegremente su seso y su voto.Un abrazo de Janusa

Anónimo dijo...

A éste no lo suben a la carroza, si no se llega a morir lo matan con una campaña mediática y el ostracismo. Se fué al origen y acertó, por eso se llama aparato reproductor y no chutador. Penalizar el aborto debería ser un principio básico de cualquier programa político que aspire a tener un voto cristiano.Un abrazo.

Mento dijo...

AUN QUEDAN HOMOSEXUALES QUE PIENSAN COMO ESTE Y QUE NO SALDRIAN MONTADOS EN NINGUNA CARROZA. LASTIMA QUE SEAN LOS MENOS Y QUE POR NO SER GENTE IMPORTANTE SE LES META EN EL MISMO SACO DE PLUMAS Y ARCOIRIS.

Anónimo dijo...

¿Pero vosotros sabéis realmente quién fue Pier Paolo Pasolini?
¿Qué no subiría a una carroza? Seguramente sería el primero, pues era del todo provocador y transgresor. De hecho, vivió con toda naturalidad su homosexualidad, lo que le llevó a protagonizar numerosos escándalos desde su adolescencia. A los 13 años ya fue descubierto in fraganti en un jardín. Sus películas son paradigma del homoerotismo y su gusto por los jóvenes fue muy conocido, lo que se puede vislumbrar en algunas de sus cintas más reconocidas, como Oedipus Rex (1967), Teorema (1968) o El Decamerón (1971). Al caer la noche, Pasolini salía en busca de jóvenes. Pero una de las noches, en noviembre de 1975, un joven delincuente, llamado Pino Pelosi, lo mató para robarle su Alfa Romeo 2000GT plateado. Algunos apuntaron a que la muerte del director se debía a una conspiración de los sectores políticos más conservadores de Italia, a los que tanto había fustigado. Pero la perspectiva del tiempo hace pensar que fue simplemente mala suerte en una noche de cruising (contactos sexuales anónimos en espacios públicos, como playas, parques, baños, etc.)...
Eso no le privó para realizar una de las más conmovedoras películas sobre Jesús: "El evangelio según san Mateo", que pasa por ser una de las más fieles al texto evangélico.
¿Qué estuvo en contra del aborto? Bueno, ¿y qué? Un gay puede ser antiabortista o proabortista; puede ser católico, budista, musulmán, agnóstico o ateo; puede ser de derechas o de izquierdas; puede ser provocador o conformista...LA HOMOSEXUALIDAD ES TRANSVERSAL: atraviesa todos los órdenes y clases sociales, todas las ideologías, todas las culturas y religiones, todos los tiempos históricos, etc.
Tenéis una fijación con los gays que es digna de estudio. Y, al mismo tiempo, parecéis no conocer mucho del tema... ¡Ay, Señor!

Anónimo dijo...

Yo escribí el comentario que me precede. Firmado: "Anathema".