miércoles, febrero 04, 2009

Las lágrimas de Federer.



Es sabido que los hombres lloran, incluso nos estamos haciendo blandengues y lloricas. Me conmoví, me emocioné con las lágrimas del gran campeón Federer. Es verdad que hacía mucho calor, falta de potasio, cinco sets, Nadal no le teme al quinto set, Federer tenía la ilusión de superar a Sampras, puede que en el cuarto set viese el partido ganado...o se acordó de mamá o de papá cuando jugaba al tenis con seis años. Eran lágrimas de desconsuelo, quizás de impotencia, de amor propio, incontenibles. Pero Nadal se fue a su lado, le abrazó. Es de las mejores escenas humanas que he visto desde hace tiempo. El deporte tiene un factor lucha que San Pablo nos pone de ejemplo de lo que es nuestra vida. Gracias por llorar Federer, gracias Rafa Nadal.

17 comentarios:

eligelavida dijo...

La constancia, el esfuerzo, la disciplina, son hábitos que llevan a muchas virtudes. El deporte es una actividad fundamental. Es curioso que casi todos los amigos que tengo vienen del deporte.

Por cierto, ¡qué partidazo!

Anónimo dijo...

eres mi blog preferido. Rápido y sencillo GRACIAS. y desde que te vi en Cope... en fin perfecto

Sinretorno dijo...

Muchas gracias.

c3po dijo...

Pues, lo mejor del asunto es que el de Manacor, al llegar a su pueblo reconoció, con la sencillez que le caracteriza, que al ver las lágrimas de RF, también estuvo a pique de aflojar el lacrimal.
Son dos Grandes. Pero Rafa es que se sale.

Anónimo dijo...

A mi el llorar me parece muy humano,descarga tensiones y quita muchas sesiones de sicólogo,igual que reímos ,lloramos y siempre tenemos a alguien que está a nuestro lado.Nadal está dando buen ejemplo ,de humildad ,lucha ,solidaridad etc etc...

Anónimo dijo...

Siempre se le consideró un hombre muy frio. En este momento se demostró que, aún siendo el mejor tenista de la historia, sigue siendo un ser humano. Felicidades a nuestro Nadal.

LuisCapitan dijo...

Los grandes hombres se asientan en grandes sentimientos, que es lo que define al alma humana, de ahí su grandeza. Tanto el gesto de Federer como la respuesta a el de Nadal confirman estos terminos.

Felicidades a ambos.

Anónimo dijo...

Yo ví esas lágrimas,hacia tiempo que no observaba algo así,es bueno humanizarse y acordarse de que a veces todos tenemos días donde a pesar de nuestro esfuerzo,nos ganan,hay que saber aceptarlo con humildad,llorar para despues levantarte.
Nadal me hizo gracia cuando dijo"siento lo de hoy..."gran hombre que sabe consolar al perdedor,magnifico gesto.

Asther

Anónimo dijo...

Las lágrimas de Federer no se entienden al margen de sus comentarios iniciales: "Esto me está matando". Después en la rueda de prensa dijo que el partido lo había perdido él por sus fallos en el quinto set, "como pasó en Wimbledon". Es como si dijera: "si yo no fallo, Nadal no me gana porque yo soy mejor". Federer no reconoce lo que es obvio: su tiempo ha pasado y Nadal, más joven, es mejor a estas alturas en todas las superficies. No hay nobleza en las lágrimas de Federer: son lágrimas que ocultan la soberbia del campeón destronado que se resiste a aceptarlo. No eran lágrimas por no igualar el récord de Sampras (¡vaya excusa más tonta!). Eran las lágrimas que marcan el fin de una carrera como número uno. Federer se cree aún el mejor y no se explica entonces por qué pierde. Federer lucha consigo mismo para aceptar que ya no es mejor que Nadal. Hasta que no lo consiga, no dejaremos de ver estas absurdas lágrimas.

Anónimo dijo...

Yo creo que los dos son buenas personas.

Juanma Suárez dijo...

Michael, las primeras palabras de Federer después de perder fueron de enhorabuena a Nadal. Él sabe que Nadal fue mejor, y lo reconoce. Ambos se respetan y lo han dejado claro desde siempre. Está claro que a Federer le está costando un poco quitarse el chip de número 1; pero lleva siéndolo ¿cinco años? A cualquiera le costaría. Yo creo que las lágrimas de Federer son de impotencia, de ver que no es capaz de ganarle a un tío de 22 años que le está comiendo el terreno; pero no creo que sean lágrimas de soberbia, sí de amor propio. Nos empeñamos en achacar defectos a la gente que, por lo que sea nos cae mal. Suele pasarle a Fernando Alonso, a Federer, en su época le pasó al ciclista Fignon... Yo creo que es más bien defecto nuestro que de la persona a la que criticamos.

Ángel dijo...

De acuerdo con todo, un gran momento para grabar en la memoria.

Por cierto, échale un vistazo a mi nuevo blog (de trabajo).

ulpiano dijo...

Fue un gran partido lleno de tensión. después de tantas horas no se pueden analizar cada gesto y cada palabra...

Sinretorno dijo...

Me pareció que su llanto era inconsolable, no entro en los motivos.

Anónimo dijo...

Pues vaya analista está hecho usted si no entra en los motivos.

Siga escondiendo la cabeza bajo tierra. Ya verá qué bien le va.


El Chico del Amanecer

Anónimo dijo...

Hay quien piensa que el conocimiento analítico -tratar de descubrir el por qué de todo, los motivos- es la manera más inteligente de llegar a la verdad de las cosas. No siempre es así, ni muchas veces tampoco. Hay que cultivar más el conocimiento contemplativo....
¡Es una de las claves de este magnífico blog!
el faro del pardo

Andrés Cárdenas M. dijo...

Yo no creo que Federer lloró por impotencia (era como el decimotercer partido que pierde con Nadal) o tristeza. Vi todo el partido y la premiación y creo que su emoción fue por el gran apoyo que recibe en Australia. Claro, no es solo eso, son muchos sentimientos encontrados, pero no fue tristeza. A Federer solo le gana Nadal.