viernes, noviembre 18, 2016

Democracia, educación y respeto al pueblo.



http://www.elmundo.es/espana/2016/11/17/582da8c8ca4741550f8b45c9.html
El Rey Felipe, aplaudido por la Reina Letizia junto a sus hijas en el...
El Rey Felipe, aplaudido por la Reina Letizia junto a sus hijas en el Congreso. Chema Moy

Algunos prefieren obviarlo, pero tras los oropeles, los baldaquinos centenarios, la guardia real a caballo y las alfombras restauradas, la sesión solemne de inicio de legislatura es mucho más que un acto protocolario, es la imagen de la esencia democrática: el Rey, símbolo de la unidad y la permanencia de la nación, junto con los diputados y senadores elegidos por la ciudadanía, los representantes de los órganos constitucionales y los poderes territoriales. Diversidad, al fin y al cabo, y también pluralidad, respeto y tolerancia.
Los gestos son importantes y en las sesiones de las Cortes con el Rey han de preservarse porque tienen significado y en ese Hemiciclo abarrotado deben sentirse representados todos los españoles. Más allá de adscripciones monárquicas o republicanas, la apertura solemne de la legislatura es un acto constitucional por encima de las ideologías.
No todos lo entienden. Sobran las imágenes, señores Errejón Iglesias, de disputa por los escaños porque en un día como este los asientos no tienen nombre y lo que toca es apiñarse y mezclarse. El Hemiciclo en las sesiones conjuntas de las Cámaras no es el cine: o llegas pronto o el que se fue a Sevilla... o a acompañar a Verstrynge, perdió su silla. Sobra el tecleteo en la pantalla del móvil mientras el Rey habla, que esto no es un aula de primaria.
Sobran igualmente los tuits de recomendación de Carolina Bescansa a la Reina. No hay comparación posible entre hacer soportar a un bebé horas y horas de debate en el Congreso, aunque las fotos resulten bonitas y rentables, que llevar a la Princesa de Asturias y a la Infanta Leonor a un acto de poco más de hora y media.
Sobran las camisetas con mensajes pretendidamente ocurrentes como la de Diego Cañamero. "Yo no voté a ningún Rey", se leía en su pecho. Ni él ni nadie. Pero ¿votó la Constitución?
Pablo Iglesias, Diego Cañamero y otros diputados de Unidos Podemos, hoy en el Congreso. | ALBERTO DI LOLLI
Sobran también las exhibiciones de quienes optan por no levantarse cuando el jefe del Estado entra en el salón de plenos o como cuando finaliza su discurso. Y, por supuesto, sobra la bandera republicana colgada en la balconada. Que, por cierto, no fue mandada retirar porque la presidencia de la Cámara sí es respetuosa.
Felipe VI sabe muy bien que no habla ante una asamblea de grandes de la nobleza, sino ante representantes de los ciudadanos. No es necesario que Pablo Iglesias recuerde que él y los suyos no están aquí "por ser hijos de nadie ni por tener sangre azul". Ninguno la tenemos, ni tan siquiera el Rey.
El Monarca abrió su discurso [léalo en PDF], él sí, expresando su respeto y reconocimiento a las Cortes Generales, porque, recordó, "en una monarquía parlamentareia, la presencia del Rey en el Parlamento es la expresión constitucional del vínculo entre los depositarios de la soberanía nacional y el jefe del Estado".
Para él no hay duda de que el Congreso es "la casa común y el lugar de encuentro entre todos los españoles". Quizá algunos no lo vean, pero es así y todo lo demás sobra"

5 comentarios:

Anónimo dijo...

DonSin,

A mi juicio, pobre juicio de un pobrecito hablador, falta lo más importante, a saber: comprender que Podemos o Ritacantaora agitando pañuelos republicanos, son símbolos de los tiempos de impunidad que vive España.

Que si los gobernantes se pasan por el arco la separación de poderes, no pasa nada: véase ley 6/85 de 1 de Julio del Poder Judicial.
Que si zp negoció un abyecto plan de paz con la ETA, y que Rajoy ha continuado, no pasa nada.
Que si los catalanes se pasan más allá las leyes, no pasa nada.
Que si S.M. se va a Arabia Saudí a SUS negocios, no pasa nada.
Que si los partidos imponen una abyecta y antidemocrática ideología de género, no pasa nada.
Que si la COPE se ha convertido en una vil cadena de radio, no pasa nada, y ningún obispo dirá nada.


Así las cosas ¿ a qué viene extrañarse porque Podemos haga esto o aquello, luzca camiseta anti democrática o sace la tricolor ?

Parafraseando a Mafalda, sólo es un sumose de lo que iniciose.

Saludos. misael

Sinretorno dijo...

Clarividente, MIsael. Pero la gente va tomando nota, eso espero.

Ana Márquez dijo...


¿Que Iglesias se siente más legitimado a estar en el Congreso que el rey porque a él "lo han elegido" y al rey no? Yo me mondo :-) ¿Y a Fidel Castro? ¿Quién lo eligió? ¿Quién eligió a su hermano Raúl? ¿No está Raúl gobernando también por "sucesión dinástica", por ser el hermano de...? A mí lo que piensen o dejen de pensar unos señores a quienes se les llena la boca con la palabra "democracia" (a la que, para más inri, añaden el adjetivo "real"), unos señores que se saben al dedillo todos los derechos fundamentales de los ciudadanos, pero que, al mismo tiempo, ensalzan y vitorean a dos dictadores comunistas que llevan medio siglo pisoteando esos derechos, me trae al pairo. Apoyando tan descaradamente a los Castro, Iglesias y compañía están dejando ver la patita, la ingle y hasta la coronilla, están admitiendo y legitimando que hay otras formas de acceder a la jefatura de un Estado, no solo por votación popular, así que el rey no está haciendo nada que en Cuba no hayan hecho antes. Si Fidel Castro lo hizo sin el consentimiento de su pueblo, durante décadas, cualquier monarca europeo está legitimado para hacerlo también. ¿Por qué no? Al monarca europeo, al menos, le puedes faltar al respeto cuanto gustes (véase el espectáculo de ayer), porque rara vez te va a encarcelar por ello. Intenta hacer lo mismo con Castro, o con Kim Jong-un, a ver si hay narices... En serio, ¿qué entiende esta gente por "libertad"? Libertad, esto me ha quedado claro escuchándoles, es eso que ellos usan cuando no se levantan para recibir al rey. Ok, pero yo tengo entendido que libertad es también eso que el "compañero Fidel" y después, por sucesión dinástica, el "compañero Raúl" han denegado a su pueblo por décadas.

Cuando los podemitas y adlátares condenen "todas" las dictaduras, empezaré a creerme de verdad en su coherencia ideológica, me creeré que les mueve algo más que un chapucero revanchismo histórico, me tomaré en serio sus reivindicaciones por chorras que me parezcan y creeré al pie de la letra eso que Iglesias declara, advirtiendo que no está en el congreso "por ser hijo de tal", sí, eso de que lo que elige el pueblo soberano es lo único que va a misa.

Besos, Daniel.

Sinretorno dijo...

bravo !!!!! Ana. Besos

Ana Márquez dijo...

He escrito mal "adláteres", jaja, -D hacía tiempo que no usaba la palabreja.

Gracias, Daniel. Un abrazote.