sábado, julio 14, 2007

Procrear o reproducir.


















Se está abandonando el concepto de procreación por el de reproducción. Procrear es humano, unir lo humano a lo divino. Cada hijo o hija es fruto de la donación estable de los padres, del amor, con toda la carga histórica, genética, humana del poder de esposa y esposo unidos a la creación de Dios. Los animales se reproducen, las personas procrean. La persona necesita de sus padres, al menos hasta los dieciseis años y toda la vida. El hijo , la hija es plenamente hijo de Dios e hijo de sus padres. Es hora de que recuperemos la idea de que un hijo no es sólo una carga, una responsabilidad, sino también un don, una alegría inmensa, una muestra de confianza de Dios en los padres. Lo más.

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Y entonces tú... ¿por qué no procreas?

Anónimo dijo...

Soy el autor del comentario anterior. Una torpeza ante el teclado ha hecho que apareciera anónimo.

Sinretorno dijo...

También hay hijos del espíritu y eunucos por el reino de los cielos.

Benita Pérez-Pardo dijo...

Los hijos son un regalo porque te enseñan lo mejor de la vida. Si no consideras lo que te dan, lo que aprendes con ellos, los puedes considerar una carga.
Siempre recibes más de lo que das, pero no en términos materiales.

Anónimo dijo...

Prometeo deja que los demás hagan uso libre y responsable de su sexualidad. Ocúpate de tu procreación...

Anónimo dijo...

Usted perdone, Dier, pero sólo he hecho una inocente pregunta. No creo haber impedido a nadie que haga uso libre y responsable de su sexualidad. Y... sí, me ocupo de mi hijo...

Anónimo dijo...

Prometeo, Prometeo... que alegría que hagas uso de tu procreación! pero ahora te queda lo más difícil: que sea responsable.

Por cierto, me puedes tutear.

Unknown dijo...

Con permiso Prometeo, voy a decirle algo a Dier: los hijos son una bendición a la que no todos acceden. Un hijo no es un acto deliberado de ardiente pasión, en donde el placer es dueño de la situación, y no el amor...ese amor filial.
Hoy ante la falta de valores, parejas se unen con la finalidad de calmar placeres, dejando el matrimonio de lado por considerarlo "antiguo", y tienen hijos, y el daño que les provcan es terrible. Son niños criados sin Dios, sin valores, sin respeto.
Los niños son hijos de sus padres, pero primero son, somos, hijos de Dios.
Un abrazo. Ando necesitando palabras de esperanza.

Anónimo dijo...

Sole, totalmente de acuerdo, salvo en que la gente deja de lado el matrimonio por considerarlo antiguo. Simplemente la gente tiene miedo a comprometerse.

Es a Prometeo a quien deberías de dirigir tus palabras pues es quien no acaba de entender que el amor no está inexorablemente vinculado a la procreación.

José Miranda dijo...

Hola a todos, os invito a comprender que cada persona está en su propio nivel, y desde ese nivel las realidades son como ella las expresa, en la variedad está el equilibrio y las diferentes formas de apreciar y conceptuar la misma cosa o caso, creo que en vez de contradecirnos es mejor respetarnos, y aprovechar la visión y concepto de álguien situado en un ángulo diferente al nuestro, para poder percibir lo que por nosotros no podemos, en vez de concentrarnos en ver el fallo ajeno, concentrémonos en aprender de lo ajeno, la vida es una escuela de aprendizaje y capacitación. José.

arteymusica/Hedo dijo...

Distinción entre procrear y reproducir