sábado, abril 18, 2009

A todos, nos toca a nosotros.



Lectura del santo evangelio según san Marcos 16, 9-15


Jesús, resucitado al amanecer del primer día de la semana, se apareció primero a María Magdalena, de la que había echado siete demonios. Ella fue a anunciárselo a sus compañeros, que estaban de duelo y llorando. Ellos, al oírle decir que estaba vivo y que lo había visto, no la creyeron. Después se apareció en figura de otro a dos de ellos que iban caminando a una finca. También ellos fueron a anunciarlo a los demás, pero no los creyeron. Por último, se apareció Jesús a los Once, cuando estaban a la mesa, y les echó en cara su incredulidad y dureza de corazón, porque no habían creído a los que lo habían visto resucitado. Y les dijo: - «ld al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación.»

3 comentarios:

Anónimo dijo...

A fecha de hoy a los que eso hacen se les tilda con frecuencia de fanáticos y beatos.Saludos

Sinretorno dijo...

Beato no se sabe lo que es hoy en día, fanáticos???, por creer y anunciar...no.

Sinretorno dijo...

Y si Jesús quiere eso, nos importa una x lo que digan.