miércoles, enero 20, 2016

La oración, siempre.








3 comentarios:

Anónimo dijo...

Que facil y dificil a la vez !Estamos arrastrados por los asuntos cotidianos.le hablo pero y El?

Sinretorno dijo...

siempre escucha y siempre habla, a través de lo cotidiano también.

Anónimo dijo...

Para mi la oración es,además,un clavo ardiendo.Quiero decir que es lo que me queda cuando falla todo.Esto puede parecer ratonero y seguramente lo es pero a mi me sirve mucho.Lo mismo que quedarme sin palabras y sin ideas ante el Señor.Un abrazo de Janusa