jueves, agosto 06, 2009

La fe de la cananea.



Fue el evangelio de ayer de la Misa o de algún día anterior. Una mujer no israelita, que pide por su hijo a Jesús. Jesús no le hace caso, la mujer insiste. Jesús como para zanjar la cuestión le dice que ha venido primero a su pueblo de Israel. La mujer no se desanima, hasta los perros comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos. Jesús, el hijo de Dios, se conmueve, se sorprende de la mujer...un Dios que se deja sorprender. Grande es tu fe y que se haga lo que pides. Escrivá aconsejaba meterse en las escenas como un personaje más. Pues bien, yo me hubiese enfadado con ese Maestro judío, me hubiese parecido incluso pelín chulo. Gracias mujer cananea por no enfadarte, por ser constante, por creer, por sorprender al Señor ( y por enseñarme 2000 años después a no enfadarme y a tener Fe).

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Señor sinretorno su relato es encantador.

Angelo dijo...

Tienes razón. A veces la actitud de Jesús nos deja boquiabiertos. Yo hubiera cogido un desaliento total. Pero hoy tenemos la ventaja de saber que El busca siempre el bien y utiliza lo que le place para que se llegue a El. También yo doy gracias al Cananea

Anónimo dijo...

SinRetorno:

Me gusta mucho este Blog "espumoso,intimista,paradójico; de lo humano y de lo divino. No soy mejor que tu... Me propongo hablar a la cara y que me hables a la cara, sin caretas, sin retorno, a quemarropa..."

All the best

sinretorno dijo...

Gracias, usted es parte de él...que tal su madre?? Me acuerdo y las vacaciones?

maria jesus dijo...

Caramba, me has descubierto un nuevo aspecto de este pasaje, se puede asombrar a Dios