jueves, marzo 01, 2007

Aceptarse.

























Es tarea de una vida. Nos gustaría, desearía, preferiría, es que, no creía que fuese, soy muy joven, demasiado,viejo, sin este achaque, creía que era gracioso, querer quedar bien con todos y ante uno mismo, repetos humanos, manías, caprichos, limitaciones, no sé cómo fui capaz de hacer esto, etc, etc. Las edades del hombre (también de la mujer para los del género) es un libro de Papini, corto, pero que da en la diana. La madurez es aceptarse y aceptar, no con la comodidad del caprichoso y egoista, soy así y punto, hay que luchar por mejorar. De todos modos mi experiencia y la de mucha gente es que no hemos sido más felices que cuando hemos pensado en los demás sin tiempo para uno mismo. No es bueno problematizar sobre uno mismo continuamente. Sentido del humor, un poco de orden y saber que aunque tú no te comprendas, Dios sí.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Este blog da paz, dentro de tu actividad mental.Gracias.