martes, julio 31, 2012

La levedad y el trastorno del mal.



Gentileza de un anónimo. Un texto de Hanna Arendt, sobre los falsos argumentos que so capa de acabar con el dolor y el sufrimiento, daban los nazis. Eran cultos, oían música clásica, pensaban en cambiar el mundo. Y nos puede pasar a cualquiera...

 «Me impresionó la manifiesta superficialidad del acusado, que hacía imposible vincular la incuestionable maldad de sus actos a ningún nivel más profundo de enraizamiento o motivación. Los actos fueron monstruosos, pero el responsable –al menos el responsable efectivo que estaba siendo juzgado– era totalmente corriente, del montón, ni demoníaco ni monstruoso. No había ningún signo en él de firmes convicciones ideológicas ni de motivaciones especialmente malignas, y la única característica notable que se podía detectar en su comportamiento pasado y en el que manifestó a lo largo del juicio y de los exámenes policiales anteriores al mismo fue algo enteramente negativo: no era estupidez, sino falta de reflexión. En el marco del juicio y del proceso carcelario israelita se supo desenvolver tan bien como lo hiciera durante el régimen nazi, pero en presencia de las situaciones para las que no valía ese tipo de procedimientos rutinarios estaba indefenso, y su estereotipado lenguaje producía en la tribuna, como evidentemente también debió hacerlo en su vida oficial, el efecto de comedia macabra. Los estereotipos, las frases hechas, los códigos de conducta y de expresión estandarizados, cumplen la función socialmente reconocida de protegernos frente a la realidad, esto es, frente a los requerimientos que sobre nuestra atención pensante ejercen todos los hechos y acontecimientos en virtud de su misma existencia. Si tuviéramos que ceder continuamente a estas solicitudes acabaríamos agotados enseguida; Eichmann se distinguía del resto de nosotros únicamente en que ignoró del todo estos requerimientos» (Hannah Arendt, La vida del espíritu, Madrid 1984, p. 14). Las consecuencias terribles de la conducta de aquel hombre se derivaba de su completo abandono a los lugares comunes. «El miembro de la jerarquía nazi más dotado para la resolución de los problemas de conciencia era Himmler. Himmler ideaba slogans, cual el famoso lema de las SS, tomado de un discurso de Hitler dirigido a estas tropas especiales, en 1931, "Mi Honor Es Mi Lealtad" (…) Lo que se grababa en las mentes de aquellos hombres que se habían convertido en asesinos era la simple idea de estar dedicados a una tarea histórica, grandiosa, única ("una gran misión que se realiza una sola vez en dos mil años"), que, en consecuencia, constituía una pesada carga. (…) Las tropas de los Einsatzgruppen procedían de las SS armadas, unidad militar a la que no cabe atribuir más crímenes que los cometidos por cualquier otra unidad del ejército alemán, y cuyos jefes habían sido elegidos por Heydrich, entre los mejores de las SS, todos ellos con título universitario. De ahí que el problema radicara, no tanto en dormir su conciencia, como en eliminar la piedad meramente instintiva que todo hombre normal experimenta ante el espectáculo del sufrimiento físico. El truco utilizado por Himmler -quien, al parecer, padecía muy fuertemente los efectos de aquellas reacciones instintivas- era muy simple y probablemente muy eficaz. Consistía en invertir la dirección de estos instintos, o sea, en dirigirlos hacia el propio sujeto activo. Por esto, los asesinos, en vez de decir "¡Qué horrible es lo que hago a los demás!", decían "¡Qué horribles espectáculos tengo que contemplar en el cumplimiento de mi deber, cuán dura es mi misión!"» (Hannah Arendt, Eichmann in Jerusalem, pp. 105-106)

Cuidado!!!!!!!!!!

domingo, julio 29, 2012

Lenin.

DECÁLOGO LENINISTA DEL SOCIALISTA:
(Escrito por Lenin en 1913)
1. Corrompa a la juventud y dele libertad sexual.
2. Infiltre y después controle todos los medios de comunicación de masas.
3. Divida a la población en grupos antagónicos, incitando las discusiones sobre asuntos sociales.
... 4. Destruya la confianza del pueblo en sus líderes.
5. Hable siempre sobre Democracia y Estado de Derecho, pero, en cuanto se presente la oportunidad, asuma el Poder sin ningún escrúpulo.
6. Colabore con el vaciamiento de los dineros públicos; desacredite la imagen del País, especialmente en el exterior y provoque el pánico y el desasosiego en la población por medio de la inflación.
7. Promueva huelgas, aunque sean ilegales, en las industrias vitales del País.
8. Promueva disturbios y contribuya para que las autoridades constituidas no las repriman.
9. Contribuya a destruir los valores morales, la honestidad y la creencia en las promesas de los gobernantes. Nuestros parlamentarios infiltrados en los partidos democráticos deben acusar a los no comunistas, obligándolos, so pena de exponerlos al ridículo, a votar solamente lo que sea de interés de la causa socialista.
10. Registre a todos aquellos que posean armas de fuego, para que sean confiscadas en el momento oportuno, haciendo imposible cualquier resistencia a la causa.

viernes, julio 27, 2012

Y más recortes.....

No somos Dios....

Javier Mª Pérez-Roldán, abogado de familia y padre de una niña con espina bífida, responde al neurocirujano Javier Esparza.
  • El Diario El País publicó ayer una carta del neurocirujano infantil Javier Esparza que lleva por título "Nadie tiene derecho a obligar al sufrimiento". En ella se muestra en contra de la prohibición del aborto en los casos de malformación fetal. En la misma apela a supuestos argumentos humanitarios para permitir el aborto, tachando a los que se oponen a ello de ignorantes o de actuar por intereses espurios. Funda su tesis en un argumento falso como es el sufrimiento de los niños con determinadas dolencias, y de sus familias.
    Desde hace 12 años soy abogado de familia y desde hace 7 padre de una niña con espina bífida. Durante estos últimos años me he dedicado, en exclusiva, a dos cosas: velar por el interés de los hijos de mis clientes, y ejercer como padre de mi hija y de sus otros dos hermanos, de 5 y 3 años.
    Mi hija tiene parálisis en ambas piernas, y desde los tres años convive diariamente con su silla de ruedas. Tiene también todos los problemas que usted cita como asociados a la espina bífida, salvo la siringomielia. Es más, su lesión (que lo es en la modalidad más grave) está localizada a la altura de la vértebra L4-L5 y según nos comentan todos los profesionales que la tratan, es la más alta que han visto es muchos años. Ha pasado por cinco operaciones, y tiene citas periódicas en siete especialidades médicas.
    Ahora bien, mi hija no sufre ni más ni menos que una niña de su edad. Juega, ríe, quiere, ama y siente exactamente igual que sus dos hermanos sanos. Y, a veces, también llora, pero sus lágrimas no tienen ningún poso de amargura ni dolor por encima de las de sus amigas o de las de sus hermanos, pues como ellos, llora por nimiedades.
    Como abogado de familia he conocido niños con depresión crónica por culpa de la separación tormentosa de sus padres, que arrastran una existencia triste y sufriente. Como sufren más que mi hija y sus hermanos, ¿los eliminaría?
    Y en cuanto a la familia, fíjese si el sufrimiento no es tan extremo como usted dice que después de su nacimiento hemos tenido otros dos hijos, señal de que el cuidado de nuestra hija no nos ha supuesto trauma ninguno.
    Estas anomalías, por sí, no causan el sufrimiento que usted pretende. De hecho, si bien el dolor ante cualquier enfermedad o revés de la vida es inevitable, el sufrimiento es totalmente voluntario, pues es éste una percepción personal y subjetiva de la propia realidad. Hay quien ante cualquier mínimo problema ante la vida sufre, y sufre sin mesura, y hay quien ante obstáculos insalvables y dolores sin medida se crece, pues admite su dolor con entereza.
    De hecho, por la enfermedad de mi hija he estado en contacto con numerosos afectados de espina bífida (algunos en grados muy severos) y siempre se han manifestado esperanzados y alegres por el don de la vida. ¿Ha oído usted de enfermos de espina bífida que se hayan suicidado o que hayan solicitado la eutanasia?. Sin duda usted conocerá el estudio de su compañero neurocirujano Rob de Jong, publicado recientemente en la revista Pediatric, donde sostiene, por medio de estudios de campo, que los recién nacidos con este mal congénito apenas tenían dolores.
    Por eso me causa sonrojo su carta, llena de adulteraciones de la realidad vivida por cientos de enfermos y sus familias. Pero mayor sonrojo me causa su supuesto humanismo. Dice usted que nadie tiene derecho a obligar al sufrimiento ¿y en qué principio ético funda usted tan categórica aseveración? ¿y porqué presupone usted el sufrimiento de estos pacientes?
    En cuanto a la fundamentación de su aseveración, alega la mismas causas que las autoridades nacional-socialistas responsables del plan de exterminio de enfermos Aktion T4. El plan se fundaba en que había vidas que no eran dignas de ser vividas, y cuyo asesinato era tanto un acto de compasión como un beneficio para la comunidad. Usted alega ambas cosas (igual que los Nazis) pues sostiene que "el colmo" es que los esfuerzos realizados para el tratamiento de estos niños es un desperdicio, pues acaban muriendo a los 20 años, y encima arrastrando un sufrimiento sin medida. ¡Qué argumento tan falaz! Usted sabe que miente, pues al día de hoy, la esperanza de vida de estos pacientes es prácticamente la misma que para personas sanas. Pero es que, además, aunque fuera verdad el fallecimiento a los 20 años ¿me va a decir usted que no merecen vivir estos 20 años? Usted está jubilado y pronto empezará a sufrir achaques. De vida, según las estadísticas del INE, no le quedan más que 16 años ¿le parecería justo que a la primera recaída de usted le privemos de un tratamiento por lo costosísimo del mismo teniendo en cuenta que no le quedan años para "amortizar la inversión" y más teniendo en cuenta que usted, en la vida, ha hecho lo que tenía que hacer? Según su teoría sería menos grave matar a un zambiano (con una esperanza de vida de 36 años) que a un español (con 81 años de esperanza).
    Las personas no son una inversión, son un bien en sí mismo, y no podemos desahuciar a los que tenga cáncer, o SIDA o cualquier otra enfermedad por lo costoso del tratamiento y por el alto índice de mortandad durante el mismo.
    En el culmen del paroxismo dice usted que el aborto ayudó a prevenir la espina bífida. Nos descubre con ello su auténtico rostro, pues según usted sería muy fácil que España se colocase a la cabeza de los países saludables. Bastaría con eliminar a todo enfermo o lesionado grave (con cáncer, SIDA, paralítico por accidente de circulación) para poder vender al extranjero nuestras estadísticas y colocarnos como el país con la mejor política de prevención de enfermedades. Veo que usted es de los expeditivos que opina que muerto el perro se acabó la rabia. ¡Menos mal que no tiene usted responsabilidades en la política penitencia, pues sabemos cómo acabaría usted con los índices de delincuencia: fulminando al delincuente!
    Sólo le quiero decir una cosa. Lo que nos hace sufrir a los afectados por esta enfermedad son los profesionales médicos como usted. Cuando a los tres meses del embarazo nos anunciaron la enfermedad de nuestra hija, nos recomendaron insistentemente el aborto, y ello hasta hacernos sentir culpables si traíamos al mundo a un niña solo para que sufriera. La realidad es nunca tomamos mejor decisión que tenerla, pues pasado el tiempo intimamos con dos matrimonios que abortaron a sus hijos por tener espina bífida ¡no sabe usted el terrible padecimiento moral de estas dos parejas al ver que si no hubiera cometido tan criminal acto podrían tener con ellos a sus hijos, que de seguro serían tan alegres y joviales como la nuestra! Y le preguntó ¿qué derecho tenían los médicos que les indujeron al aborto a obligarles al calvario de remordimientos que están pasando?
    Que sepa que mi hija enferma tiene la misma dignidad que usted y el mismo derecho a vivir que tuvo usted. Ninguna sociedad tiene derecho a decir sobre si la vida de otro es digna o no, o a determinar si una enfermedad causa o no sufrimiento sin preguntar al afectado.
    Mi hija necesita para vivir de la ayuda de otros en el mismo grado en que yo la necesito, aun estando sano. Si los hombres vivimos en sociedad es porque nos es necesario el concurso de otros para nuestra supervivencia. Por esto existe la sociedad y los gobiernos de la mismas: para ejercitar la ayuda mutua. En occidente tenemos la suerte de que prosperó la razón benéfica del ágora de Atenas sobre el terror eugenésico del Taigeto espartano ¿usted que es, ateniense o espartano?
  • miércoles, julio 25, 2012

    Buen discurso.

    Gentileza de Jorge de Mangopla.

    por Bryan Dyson, ex Presidente de Coca Cola. Lo dijo al dejar el cargo de Presidente de Coca Cola.

    "Imagina la vida como un juego en el que estás malabareando cinco pelotas en el aire". Estas son: - Tu Trabajo, - Tu Familia, - Tu Salud, - Tus Amigos y - Tu Vida Espiritual, Y tú las mantienes todas éstas en el aire. Pronto te darás cuenta que el Trabajo es como una pelota de goma. Si la dejas caer, rebotará y regresará. Pero las otras cuatro pelotas: Familia, Salud, Amigos y Espíritu son frágiles, como de cristal. Si dejas caer una de estas, irrevocablemente saldrá astillada, marcada, mellada, dañada e incluso rota. Nunca volverá a ser lo mismo. Debes entender esto: apreciar y esforzarte por conseguir y cuidar lo más valioso. Trabaja eficientemente en el horario regular de oficina y deja el trabajo a tiempo. Dale el tiempo requerido a tu familia y a tus amigos. Haz ejercicio, come y descansa adecuadamente. Y sobre todo...crece en vida interior, en lo espiritual, que es lo más trascendental, porque es eterno. Shakespeare decía: Siempre me siento feliz, ¿sabes por qué? Porque no espero nada de nadie. esperar siempre duele. Los problemas no son eternos, siempre tienen solución. Lo único que no se resuelve es la muerte.
    La vida es corta, ¡por eso, ámala.! Vive intensamente y recuerda:
    Antes de hablar... ¡Escucha ! Antes de escribir... ¡ Piensa! Antes de criticar... ¡ Examínate ! Antes de herir... ¡ Siente ! Antes de orar... ¡ Perdona ! Antes de gastar... ¡ Gana ! Antes de rendirte... ¡ Intenta ! ANTES DE MORIR... ¡¡ VIVE !!

    jueves, julio 19, 2012

    Desagraviar.






    Es un misterio, que quien nos creó, nos dejase la capacidad de ofenderle. Pero nos da el perdón en el sacramento de la penitencia. Me conmueve esta foto del Beato Juan pablo II.

    lunes, julio 16, 2012

    De la carta de julio del Prelado del Opus Dei.






     Ya me he referido a algunas de esas "preocupaciones" de ahora y de siempre: la vida de la Iglesia y del mundo, la salvación de las almas, el apostolado cotidiano, que deberían estar presentes en todos los hijos de Dios. Otras, quizá más inmediatas, están relacionadas con la crisis que afecta a muchos países en todas partes, aunque con diferente intensidad. No ignoro sus consecuencias y tampoco paso por alto que, por esas dificultades, algunos puedan sentirse particularmente agobiados: el paro, la necesidad de renunciar al mínimo necesario de comodidad, con la urgencia de hacer mil equilibrios para que el presupuesto familiar llegue a fin de mes, si es que llega. Os aseguro que me siento muy cerca de todos y de cada uno, y rezo especialmente por los que se hallen en mayores dificultades. Sin dejar de realizar —los gobernantes y todos— las gestiones precisas para salir cuanto antes de esa situación, mi consejo es que confiemos en el Señor y le ofrezcamos con alegría las estrecheces que debamos soportar.

    Al mismo tiempo, no tengáis inconveniente en aceptar un trabajo que esté por debajo de vuestra capacitación profesional, en espera de que se presenten momentos más favorables. Tratad de sacar partido a los tiempos malos: afrontados con visión sobrenatural, nos servirán para madurar humanamente y hacernos crecer en unión con Dios y en solidaridad con otras personas.

    Esta situación constituye otra oportunidad más para que nos ayudemos a sobrellevar con garbo las dificultades. En los días pasados me venían mucho a la memoria unas palabras del Señor en la Última Cena, que nuestro Fundador repitió incansablemente a lo largo de su existencia: que os améis unos a otros. Como Yo os he amado, amaos también unos a otros. En esto conocerán todos que sois mis discípulos[13]. Y recuerdo la emoción con que san Josemaría evocaba los últimos momentos en la tierra del Apóstol quem diligébat Iesus[14]. En efecto, narra una antigua tradición que san Juan, quizá con la voz caduca por la edad —así se lo imaginaba nuestro Padre—, repetía: filíoli, dilígite altérutrum!, ¡hijitos míos, que os queráis![15].

    Que nadie se sienta solo. Que cada uno se sepa apoyado, protegido, por la oración y el cariño fraterno de los otros. Esmerémonos en servir, de modo que la convivencia con los demás discurra de un modo amable, agradable, con detalles concretos. Muchas veces basta una sonrisa, una mirada de cariño, un saber escuchar con verdadero interés las penas de los otros, para aliviar la situación de quien atraviesa un momento difícil. ¡Qué actualidad guardan aquellas palabras de Camino!: más que en "dar", la caridad está en "comprender"[16].    www.opusdei.org 

    domingo, julio 15, 2012

    Desastre moral...




    Sabes que tu padre y el mío se pueden casar en España, pero no podríamos fumar en la boda?????

    jueves, julio 12, 2012

    Museo de Balenciaga en Getaria.



    Visita de dos horas al magnífico museo de Cristóbal Balenciaga.Me doy cuenta de que la moda es muy importante y que Balenciaga junto con Channel y Dior fueron el triunvirato estelar de la moda de los 50 y 60. Dior dijo " nosotros con los materiales hacemos lo que podemos, Balenciaga hacía lo que quería.

    Museo dedicado a la figura de gran modisto Cristobal Balenciaga. En el que se puede ver una exposición permanente compuesta por unas 100 obras de arte creadas por él. También hay espacios para las exposiciones temporales.
    El museo ubicado en Getaria, su pueblo natal, tiene la vocación de ser una referencia internacional en el mundo de la moda.

    Distribución de espacios del Museo Balenciaga:
    • 2000 m2 Exposición permanente
    • 200m2 Exposiciones temporales
    • 500 m2 Centro formativo
    • 2000 m2 Atrio multifuncional
    • 350 m2 Zona administrativa
    • 500 m2 Almacenes e instalaciones
    • 250 m2 Auditorio
    • 120 m2-Centro de documentación - Biblioteca

    lunes, julio 09, 2012

    Carta de un ateo francés a su hijo.

    La información es de http://religionconfidencial.com/ . Sin comentarios. Bendito ateo.






    Querido hijo: Me pides un justificante que te exima de cursar religión, un poco por tener la gloria de proceder de distinta manera que la mayor parte de los condiscípulos y temo que también un poco para parecer digno hijo de un hombre que no tiene convicciones religiosas. Este justificante, querido hijo, no te lo envío ni te lo enviaré jamás. No es porque desee que seas clerical, a pesar de que no hay en esto ningún peligro, ni lo hay tampoco en que profeses las creencias que te expondrá el profesor. Cuando tengas la edad suficiente para juzgar, serás completamente libre pero, tengo empeño decidido en que tu instrucción y tu educación sean completas, y no lo serían sin un estudio serio de la religión. Te parecerá extraño este lenguaje después de haber oído tan bellas declaraciones sobre esta cuestión; son, hijo mío, declaraciones buenas para arrastrar a algunos pero que están en pugna con el más elemental buen sentido. ¿Cómo sería completa tu instrucción sin un conocimiento suficiente de las cuestiones religiosas sobre las cuales todo el mundo discute? ¿Quisieras tú, por tu ignorancia voluntaria, no poder decir una palabra sobre estos asuntos sin exponerte a soltar un disparate? Dejemos a un lado la política y las discusiones y veamos lo que se refiere a los conocimientos indispensables que debe tener un hombre de cierta posición. Estudias mitología para comprender historia y la civilización de los griegos y de los romanos y ¿qué comprenderías de la historia de Europa y del mundo entero después de Jesucristo, sin conocer la religión, que cambió la faz del mundo y produjo una nueva civilización? En el arte ¿qué serán para ti las obras maestras de la Edad Media y de los tiempos modernos, si no conoces el motivo que las ha inspirado y las ideas religiosas que ellas contienen? En las letras ¿puedes dejar de conocer no sólo a Bossuet, Fenelón, Lacordaire, De Maistre, Veuillot y tantos otros que se ocuparon exclusivamente de cuestiones religiosas, sino también a Corneille, Racine, Hugo, en una palabra a todos estos grandes maestros que debieron al cristianismo sus más bellas inspiraciones? Si se trata de derecho, de filosofía o de moral ¿puedes ignorar la expresión más clara del Derecho Natural, la filosofía más extendida, la moral más sabia y más universal? –éste es el pensamiento de Juan Jacobo Rousseau-. Hasta en las ciencias naturales y matemáticas encontrarás la religión: Pascal y Newton eran cristianos fervientes; Ampere era piadoso; Pasteur probaba la existencia de Dios y decía haber recobrado por la ciencia la fe de un bretón; Flammarion se entrega a fantasías teológicas. ¿Querrás tú condenarte a saltar páginas en todas tus lecturas y en todos tus estudios? Hay que confesarlo: la religión está íntimamente unida a todas las manifestaciones de la inteligencia humana; es la base de la civilización y es ponerse fuera del mundo intelectual y condenarse a una manifiesta inferioridad el no querer conocer una ciencia que han estudiado y que poseen en nuestros días tantas inteligencia preclaras. Ya que hablo de educación: ¿para ser un joven bien educado es preciso conocer y practicar las leyes de la Iglesia? Sólo te diré lo siguiente: nada hay que reprochar a los que las practican fielmente, y con mucha frecuencia hay que llorar por los que no las toman en cuenta. No fijándome sino en la cortesía en el simple ‘savoir vivre”, hay que convenir en la necesidad de conocer las convicciones y los sentimientos de las personas religiosas. Si no estamos obligados a imitarlas, debemos por lo menos comprenderlas para poder guardarles el respeto, las consideraciones y la tolerancia que les son debidas. Nadie será jamás delicado, fino, ni siquiera presentable sin nociones religiosas. Querido hijo: convéncete de lo que digo: muchos tienen interés en que los demás desconozcan la religión, pero todo el mundo desea conocerla. En cuanto a la libertad de conciencia y otras cosas análogas, eso es vana palabrería que rechazan de ordinario los hechos y el sentido común. Muchos anti-católicos conocen por lo menos medianamente la religión; otros han recibido educación religiosa; su conducta prueba que han conservado toda su libertad. Además, no es preciso ser un genio para comprender que sólo son verdaderamente libres de no ser cristianos los que tienen la facultad de serlo, pues, en caso contrario, la ignorancia les obliga a la irreligión. La cosa es muy clara: la libertad exige la facultad de poder obrar en sentido contrario. Te sorprenderá esta carta, pero precisa hijo mío, que un padre diga siempre la verdad a su hijo. Ningún compromiso podría excusarme de esa obligación. Recibe, querido hijo, el abrazo de TU PADRE.

    sábado, julio 07, 2012

    Sexo y matrimonio....



    Por Rafael Navarro-Valls
    MADRID, martes 3 julio 2012 (ZENIT.org).- Ofrecemos a nuestros lectores, en la sección Observatorio Jurídico, un artículo de nuestro colaborador habitual Rafael Navarro-Valls, miembro de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de España. Esta vez aborda el llamado “matrimonio homosexual”.
    *****
       Varias noticias recientes han proyectado de nuevo sus focos sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo. Selecciono algunas. El presidente Obama hace una declaración apoyando el matrimonio entre homosexuales. Su pronunciamiento lo hace un día antes de que se celebrara la cena ofrecida al mandatario afroamericano por el actor George Clooney en su casa de Los Angeles, a 40.000 dólares el cubierto. El resultado en dólares fue en torno a los 13 millones. No está mal. Casualmente, George Clooney es, junto a Brad Pitt, el máximo defensor y propagador de la idea del matrimonio gay. Se entiende que algunos medios hayan adelantado que la declaración de Obama fue una especie de quid pro quo. Prácticamente coincidiendo con la declaración presidencial, el Estado de Carolina del Norte votó a favor de incluir en su Constitución una enmienda que define el matrimonio como la unión exclusiva entre un hombre y una mujer. Se trata del Estado número 31 de Norteamérica que aprueba una declaración constitucional que veta los matrimonios entre personas del mismo sexo. Así, en los 32 referendos sobre el matrimonio gay, el ganador ha sido el matrimonio natural: venció en los 32. Lawrence Jacobs, director ejecutivo del Congreso Mundial de las Familias, precisa: “el matrimonio gay gana donde no se vota el tema. Más aún, a menudo la gente en las encuestas dice estar a favor del matrimonio del mismo sexo, pero luego, cuando vota, gana el matrimonio natural".

       De América a Europa

       Si de América pasamos a Europa, la Iglesia anglicana de Inglaterra acaba de oponerse a la propuesta del Gobierno británico de legalizar los matrimonios homosexuales civiles, alegando que dañará los estrechos vínculos que mantiene con el Estado desde hace cinco siglos. Como es sabido, dicha propuesta es una promesa de campaña de los liberaldemócratas, socios minoritarios de la coalición gubernamental liderada por el primer ministro, David Cameron, que la ha hecho propia. En fin, el 3 de julio se cumplen 7 años desde la entrada en vigor en España de la reforma del Código Civil que autorizó los matrimonios entre personas del mismo sexo. Aunque el gobierno del presidente Zapatero llegó a hablar de más de 100.000 enlaces en dos años, la realidad es que hasta el día de hoy –si estamos a los datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística– menos de una cuarta parte de los matrimonios pronosticados se han llevado a efecto. Es decir, unos 23.000. Como es sabido, la Ley fue aprobada por un estrecho margen de votos, los principales organismos jurídicos del país se mostraron muy reticentes (Consejo General del Poder Judicial, Consejo de Estado y Real Academia de Jurisprudencia y Legislación) y fue presentado un recurso de inconstitucionalidad contra la ley, aún no resuelto.

       Dejando el apasionamiento tras la puerta, conviene reflexionar sobre las razones que hacen levantar la polémica siempre que en determinado habitat geográfico se plantea la introducción del llamado matrimonio gay.

       Probablemente la primera es la que podríamos llamar “la naturaleza de las cosas”. Las instituciones jurídicas tienen una configuración que si admite modificaciones parciales se resisten al cambio radical de su estructura. La compraventa, por ejemplo, supone el cambio de cosa por precio y no es posible transmutarla en cambio de cosa por cosa, pues esa alteración invade los dominios de otra institución jurídica: la permuta. Tal vez por esa configuración natural de las instituciones el Tribunal de Derechos Humanos ha recordado reiteradamente que la Convención Europea de Derechos Humanos solamente garantiza como derecho fundamental el matrimonio entre un hombre y una mujer. De ahí que ningún estado venga obligado a regular un matrimonio distinto del heterosexual.

       La garantía constitucional de las instituciones

       En España este argumento se ha trasladado a lo que se llama la “garantía constitucional”, que configura desde la perspectiva de la Constitución un modelo de matrimonio basado en el principio heterosexual, esto es, en la unión de un hombre y una mujer. Desde esta perspectiva, la garantía institucional así entendida parece no compatible con normas que tuvieran por objeto vaciarla de contenido propio o desnaturalizarla, creando figuras que sustancialmente prescindan de los perfiles básicos que le son propios. En otros términos, la existencia de una garantía institucional del matrimonio determina –como autorizadamente se ha dicho- la dudosa constitucionalidad de las eventuales normas que, sin hacerlo desaparecer, desvirtúen, tergiversen o desnaturalicen su contenido predeterminado por la Constitución. Se explica así la tacha de inconstitucionalidad presentada contra la ley de 2005 española, que cambia radicalmente la estructura del matrimonio natural.
       La Declaración de Westminster sobre el matrimonio, firmada por una Plataforma de más de 70.000 personas, que incluye personalidades de un amplio espectro, contiene un elenco de razones –fríamente expresadas, al estilo anglosajón- que hacen social y jurídicamente discutible la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo. Para los firmantes, el matrimonio es la única relación biológicamente complementaria. La única unión legal que puede conducir de manera natural a la procreación. El hecho de que haya una vinculación natural entre intimidad sexual y procreación es lo que hace al matrimonio distinto y diferente. Redefinir su estructura socavaría esa diferenciación e incurriría en el riesgo de normalizar la instrumentalización tecnológica de la reproducción, incrementando el número de familias en las que existe una confusión de la identidad biológica, social, y familiar.

       Igualdad y no discriminación

       En fin, la razonable sensibilidad contemporánea hacia la igualdad ha llevado a cargar la mano en el tema de la discriminación que supuestamente implica el matrimonio heterosexual. Es un argumento más emotivo que reflexivo. En realidad, los homosexuales tienen acceso al matrimonio al igual que los heterosexuales. Nada impide a un varón homosexual contraer matrimonio con una mujer, homo o heterosexual. O viceversa. De hecho matrimonios con estas características se celebran cada día en el mundo.
       Redefinir el matrimonio para hacerlo accesible a personas del mismo sexo, supone pensar que las limitaciones insertas en todo derecho fundamental (en este caso, el ius connubii, el derecho a contraer matrimonio) son discriminatorias. Esto desconocería las características del orden jurídico. La intersubjetividad a que toda persona está abocada --esto es, el Derecho- no es limitación de su esencia, sino parte de ella misma. El orden jurídico tutela a la persona desde la base de la interpersonalidad, no simplemente desde su individualidad. Quiero decir, que las limitaciones del ius connubii –siempre que sean razonables– son exigencias de la persona humana en relación con la propia unión conyugal. De otro modo, los impedimentos matrimoniales existentes en todas las legislaciones del mundo serían discriminatorios. Lo sería, por ejemplo, la prohibición de contraer matrimonio entre parientes cercanos (padres e hijos, hermanos etc) o la de no poder contraer matrimonio las personas menores de una determinada edad.
    Ya comprendo que la frialdad del razonamiento jurídico pueda contrastar con la corriente emotiva que se oculta en la cuestión, pero la realidad es que la transformación de las relaciones familiares solamente en refugios asistenciales o sexuales choca con el modelo matrimonial. Este no pretende exclusivamente la tutela de simples relaciones asistenciales, amicales o sexuales, lo que persigue, además, es un estilo de vida que asegure la estabilidad social y el recambio de las generaciones. Tal vez esta sea una de las razones que justifican que hoy, de 192 países representados en la ONU, solamente once reconozcan el matrimonio entre personas del mismo sexo.

    lunes, julio 02, 2012

    El matrimonio es subversivo.

    De Aceprensa


    Jennifer Roback Morse, doctora en Economía y colaboradora en diversos medios, fundó el Ruth Institute para ayudar a los jóvenes a crear un clima social e intelectual favorable al matrimonio. Confía en que sean ellos quienes lideren el cambio hacia una sociedad pro familia, del mismo modo que los jóvenes de finales de 1960 llevaron a cabo su particular revuelta contracultural.
    Cuando estalló la primavera hippie y el ideal de moda era liberar a la sociedad de las “cavernas del orden”, intelectuales como Sartre, Marcuse o Foucault podían permitirse el lujo de predicar ideas antifamiliares a la llamada Generación del Baby Boom (nacidos después de 1946). Pero hoy, resulta más difícil decretar un estado de felicidad permanente bajo esos mismos presupuestos.
    Algunos baby boomers desencantados reconocen ahora que detrás de ese experimento social había muchos riesgos. Que todos esos cambios en los comportamientos tenían consecuencias: también para los miembros de otras generaciones. Y que había algo de elitismo irresponsable en quien propone un programa de ingeniería social a una generación sin reparar en sus víctimas colaterales.
    Jennifer Roback Morse ofrece uno de esos testimonios en una carta abierta a los jóvenes de la llamada Generación del Milenio, la primera que alcanzó la mayoría edad en el nuevo milenio. Publicada en MercatorNet, la carta se abre con un dramático recuento de costes sociales con el que la autora quiere mostrar que los cambios legislativos adoptados en un determinado momento histórico acaban repercutiendo en quienes vienen después.
    “Mi generación, la del Baby Boom, ha convertido el matrimonio en lo que veis ahora. Pero la culpa no es enteramente nuestra. Nosotros no inventamos la píldora anticonceptiva. Ni el divorcio sin causa. Ni la sentencia Roe v Wade. Nosotros solo fuimos la primera generación que padeció todas estas cosas”.
    (...) “Muchos de nosotros nos dejamos llevar por la corriente; construimos nuestras vidas sobre la anticoncepción, el divorcio y el aborto. Pensamos que sería increíblemente divertido separar el sexo y la procreación del matrimonio; o la estabilidad y la fidelidad del matrimonio”.
    “Y ahí están los resultados: más infelicidad y pobreza entre los niños; más soledad y desesperación entre los adultos; más intervencionismo por parte de los tribunales en la vida privada de las familias; y la brecha entre ricos y pobres cada día más grande, ahora por culpa de un nuevo factor: la desigualdad matrimonial”.
    Formar “líderes emergentes”
    Desde que puso en marcha el Ruth Institute, con sede en California, Roback Morse ha tenido la oportunidad de conversar con cientos de jóvenes. Además, su experiencia docente le ha dado pie para conocerlos bien: enseñó Economía durante 15 años, primero en la Universidad de Yale y después en la George Mason University.
    Sabe que en muchos jóvenes de hoy late tanto la aspiración a casarse como el miedo al compromiso y al divorcio. Con todo, no duda en proponerles un reto audaz: “Si la cultura del matrimonio ha de ser restaurada, sois vosotros, la generación de los jóvenes del milenio, a quienes corresponde llevarlo a cabo”.
    El programa Emerging Leaders, del Ruth Institute, nació precisamente para ayudar a los jóvenes a crear un clima social y cultural favorable al matrimonio. Los impulsores de la iniciativa no se contentan con que los participantes reciban formación. Pretenden, además, que los propios jóvenes difundan lo que han aprendido.
    Para eso, les entrenan en el arte del activismo cultural. Allí aprenden a soltarse en las redes sociales, a redactar notas de prensa, a mantener un blog, a organizar un libro-fórum, un debate o una tertulia... El instituto ofrece ayudas económicas a todos los que quieren crear un grupo de voluntarios para promover el matrimonio. También les ofrecen un manual de actividades con numerosas ideas y recursos.
    Comprometerse con el matrimonio
    El compromiso público de apoyar la institución del matrimonio en la vida social, dice Roback Morse, ha de ir precedido del convencimiento de que cada uno ha de cuidar su compromiso matrimonial.
    Por eso, a los jóvenes que todavía no están casados, les anima a repetir desde el noviazgo las siguientes palabras: “Quiero y deseo casarme. Y cuando me case, pretendo permanecer casado el resto de mi vida. Me comprometo a hacer todo lo que pueda por el bien común de mi matrimonio y de mi familia”.
    Para Roback Morse, estas palabras expresan la esencia del nuevo movimiento a favor del matrimonio que ha de surgir en EE.UU. y en otros países. Nuevo porque se nutre del compromiso personal y rejuvenecido –el de los jóvenes del milenio– con el amor conyugal

    domingo, julio 01, 2012

    Victoria!!!!

    Vivir para creer. De pupas universales a tricampeones. Jugando con precisión alemana, toque brasieleiro y defensa italiana. Vamos a ver si pasamos del fútbol a la España real.