Los posts, poco exitosos, anteriores vienen a cuento de lo importante que es el tiempo, bien escaso, para hacer tantas cosas. A fin de cuentas muchos varones se dicen que pinto en casa a partir de las seis y media? Pues compartir todas las tareas del hogar, atender a su esposa y a sus hijos, sus deberes de formación, religiosos etc. Hasta hace treinta años los papeles estaban muy claros y aquello funcionó, pero ahora ha cambiado, ser esposo y padre es más difícil y lleva más esfuerzo. Las madres y esposas siguen sacando su familia y su casa adelante y además trabajan como locas; resultado están agotadas, con fibromialgia. El trabajo en el hogar es valorado cero. Por su trabajo una mujer no se atreve a tener demasiados hijos. Me parecen muy buenas las medidas de conciliación de trabajo y familia, pero son difíciles y no soy experto. Pero quizás un primer esfuerzo esté en racionalizar horarios, en la virtud del orden. Escrivá dice que para los ingleses el tiempo es oro, para un cristiano el tiempo es gloria.
1 comentario:
Menos mal que la cosa ya no es como en la viñeta, menos mal! Pero habrá algunos que si pueden se escaquean!
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