Josemaría Escrivá.

Es un santo del siglo XX, pero como todo santo pasa a ser de todos los siglos. Un profeta de la misión del laicado, de la defensa de la libertad de las conciencias,de la santidad en la vida ordinaria, del alma sacerdotal y de la mentalidad laical; un trabajo que no ofrecerías a los hombres no debes ofrecerlo a Dios. Nació el día 9 de enero de 1902. El mundo del cine y el mundo católico están impacientes por ver la película que presentará en primavera de 2011 el director de cine Roland Joffé "There be dragons" ( encontrarás dragones) en el que tiene papel protagonista Josemaría Escrivá(http://www.therebedragonsfilm.com/ ). Un drama épico situado en la guerra civil española, del autor de La Misión o los Gritos del silencio, donde se afronta la santidad, la traición, la violencia, el amor y odio y el perdón. Los mapas medievales cuando un territorio no era conocido ponían el lema de "tierra de dragones". Todos en la vida tenemos dragones que afrontar, la vida ordinaria puede ser insulsa o heroica. Tomamos decisiones que nos hacen mejores o peores. Hay momentos de inflexión y es necesario huir de ciclos de odio, violencia y resentimiento. La memoria histórica, la de verdad, es para perdonar, ser perdonado, arrepentirse y aprender. El panorama que tuvo San Josemaría desde 1928 era de dragones, un terreno virgen, olvidado; todo por hacer, un nuevo camino en la Iglesia y en la humanidad. Dará mucho que hablar.