martes, febrero 27, 2007

Carroña.




Hay gente dispuesta a hacerse de oro a cuenta de las desgracias de los demás, husmean su vida privada, hablan con el portero, con el chófer, con el amigo que decía ser íntimo, con el gitano de la cárcel, lo que sea. Pensaba que respetarían a la hermana de la princesa, pero me equivoqué. Este negocio de mierda, se sostiene porque la gente, los que no ven más que los reportajes de naturaleza, sostienen este asunto consumiendo la mierda que se les proporciona. Se puede hablar de periodismo profesional del corazón? Tal y como está ahora digo que no, y la profesión periodística debería autocontrolarse.