viernes, abril 15, 2005

Ironía cristiana.

Que ciegos y atolandrados somos a veces. Cosas que nos parecen tremendamente importantes, no lo son y otras pequeñas sí lo son. Nos preocupa la política, la actualidad, la radio, las leyes, las propuestas, nuestro orgullo, si dijeron, si no dijeron que si yo, que si tú, que si te acordaste, que si no. Qué fue del comunismo?, qué de la teología de la liberación? y de hans Kung? desde que no da clase en facultad católica, él mismo se da cuenta de que pinta poco, y de Leonardo Boff, le va bien con su parienta?. Todo es muy relativo y muy importante a la vez. Miro a la Capilla sixtina, ahí está todo, el presente, el pasado y el futuro. Al final el que salva sabe y el que no, no sabe nada. De qué te sirve ganar el mundo , si pierdes tu alma?. Recemos fuerte, apretando, ofreciendo hasta la respiración, como decía San Josemaría Escrivá, por el cónclave. Ah, hoy , de nuevo, uno me dijo que por qué el Papa no vende el Vaticano y se lo da a los pobres, pues porque el Vaticano es de los pobres y su presupuesto inferior al de la Universidad de Granada. Vendamos el Guernica, el Thyssen, la Moncloa... y le dije que empezara por vender su 4x4, última gama. El día que dos enamorados se regalen un saco de cemento, hemos acabado.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Razón tienes, mucha razón. Es cierto el dato de que el presupuesto del Vaticano es inferior al de la Universidad de Granada? Me parece increible.

Anónimo dijo...

Cada latido, cada respiración, me gusta. Vi el video de Tony y mañana lo,el lunes lo ven mis alumnos de toledo