Se hizo un silencio cósmico sobre la tierra, una mujer joven y virgen dio a luz al Salvador, que tiene frío y que llora. Dios se hizo hombre, un niño como cualquier otro. Unos pastores vinieron y muchos ángeles. Decir esto, hasta cierto punto, es fácil pero supone el acontecimiento por antonomasia, todo lo demás son reminiscencias de esta noche, recuerdos, la creación entera se hizo para este momento. Y la alegría se nos desborda, todo lo humano se hace divino:llorar,reir, amar,crecer, comer, trabajar, sufrir. Todo tiene sentido. La respuesta de los filósofos, de los pensadores, de los inquietos, de los pastores, de los simples, de los complicados, es un Niño. Cántale y quiérele. Feliz Navidad. Ah, y vino para todos los que tienen buena voluntad, para todos, aunque no creas.
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