Es más fácil consolar que ser consolado. Anima mucho ver alguien que está peor que tú. Ultimamente quedo con gente a la que pretendidamente me gustaría animar, alegrar, comprender. A los cinco minutos me animan, me alegran, me comprenden, se debe notar demasiado que el que necesita ser consolado soy yo. En parte me alegra porque ellos se sienten mejor. Uno de los últimos con que hablé me recomendo ir como voluntario con enfermos a Lourdes. Me dejó de piedra, yo quería proponerle algo del estilo, pero se me adelantó. Estoy quedando con menos gente.
1 comentario:
Es un consuelo el que haya alguien que le importa la gente.Cada vez estoy más convencida /o del egoismo humano.Hay que funcionar con miras no solo humanas porque si no acabas estrellado.Sobre todo el personal sensible.La gente es tan fría!
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