lunes, abril 09, 2007

Juan XXIII





















Hemos tenido unos Papas excepcionales en los últimos cincuenta años. Juan XXIII decían que sería un Papado de transición y la que se armó, el Concilio Vaticano II, el nuevo Código de Derecho canónico. Era un hombre santo, bonachón, pero muy listo y muy firme en sus convicciones. Cuando comenzó el Concilio un padre conciliar se le quejó personalmente de algunos aspectos de la organización. El Papa con gran cariño pero con sentido del humor le dijo, que importante el sentido del humor : perdone usted pero ni el Secretario del Concilio ni yo hemos estado nunca antes en un Concilio. Al oir una blasfemia en la nunciatura de París, donde estuvo, le dijo a un obrero: oiga por qué no dice mierda como todo el mundo. Qué humano y qué divino.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Sin retorno, si sigues así me hago católica, que empiezo a saber de que va eso. Por qué los curas no explican las cosas como tú. Tú no eres cura.Sara

Cristian dijo...

Sin retorno:
Feliz Pascua de Resurrección. Bendiciones.