Estás en un blog espumoso, intimista, paradójico; de lo humano y de lo divino. No soy mejor que tú... Me propongo hablar a la cara y que me hables a la cara, sin caretas, sin retorno, a quemarropa... blog del Profesor Tirapu
martes, marzo 28, 2006
Historia de cuaresma.
Aquel monje mayor que vivía en desierto salía a pedir en las horas de más calor. Su cuerpo enjuto aguantaba bien el calor, pero en ocasiones debía meterse una pequeña chinita en su boca para que no se le pegara la lengua. Al atardecer pasaba por una fuente cristalina y fresca y ofrecía a Dios el sacrificio de no beber hasta que llegaba al convento; como una respuesta de Dios salía un lucero que le llenaba de gozo. Aquel día un monje recién llegado le acompañaba. El nuevo monje sudaba y sudaba y su cara se iluminó cuando vio la fuente. El viejo monje pensaba qué haría. Podía darle ejemplo, explicarle lo del lucero, pero no había tiempo para grandes reflexiones. El joven monje le miraba con ansiedad. El viejo se inclinó y bebió. El joven ,gozoso, se bebía la fuente. Poco después el viejo monje alzó la mirada, esperando no ver el lucero, pero ante su sorpresa vio que habían salido dos.
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5 comentarios:
¡!
Me da pena no saber más de la biblia porque este tipo de historias son muy bonitas y están llenas de mensajes que debido a mi "incultura" católica no entiendo muchas veces.
Una cosa que te quería preguntar, ¿es necesario el sacrificio para servir a Dios? ¿porqué se utiliza el sacrificio como simbolo de amor hacia él? Lo digo por ej por las personas que andan de rodillas o por ej el monje este que no bebía agua.
Caro Hamster,tú sabes más de lo que dices. Esta no es una historia de la biblia. Es más bien una parábola que pone de manifiesto que la caridad , el amor es superior al sacrificio. Dios es Amor para nosotros y de nosotros para El.El sacrificio, el esfuerzo, el coraje es necesario para la vida, desde levantarse, trabajar, darse a los demás. En el amor humano hay mucho de genial pero si hay entrega de verdad tambi´çen muchas negaciones, pero por amor. Respecto a esas penitencias que hace la gente, en principio son respetables. Pero Dios es el que mira en el corazón del hombre. En esas penitencias se puede meter la vanidad, me están mirando etc pero hay mucha gente que las hace con verdadero sentido de petición o de penitencia. Jesús decía que si ayunas u oras, perfuma tu cabeza, sonríe, no vayas de víctima...
Me ha gustado la explicación del sacrificio.Ese Dios sabe más:mira en nuestro corazón...Y sabe todo lo que hacemos,lo que nos cuesta y lo que no...Aupa!
Conocí a un sacerdote que en una ciudad andaluza iba, a las ¡5 de la tarde de agosto! con su sotana y un sol de justicia camino de una predicación. Un hombre le paró por la calle y le dijo si tenía unos minutos. El sacerdote, pese a su prisa, se detuvo y el hombre entró en una cafetería, se sitúo en un lugar donde el resto de parroquianos no podían verlo, y sacó una pistola y la puso encima de la mesa y le dijo: "Padre, yo iba camino de mi suicidio, ya que estoy desesperado, sin salida, pero le he visto y he pensado: 'este hombre, con el calor que hace y de negro, ¿por qué lo hará?' y le he parado".
Como podéis suponer el sacerdote no llegó a la predicación, pero salvó ese día una vida. No nos damos cuenta muchas veces del valor que tiene el sacrificio para los otros.
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